El Neo Ratón Pérez

Después de no sé cuántas semanas esperando a que el primer diente flojo se cayera,finalmente el maldito voló.Pero literalmente eh.En circunstancias que nunca se esclarecerán,tuvo lugar uno de esos juegos bestias típicos de los varones (ya me imagino a las nenas quejándose:"ay que bruutos!",por el cual una piña acertó en la cara de mi hijo,y el diente,que ya pendía de un hilo,salió eyectado a los pasillos del cole.La maestra puso una recompensa para los 4 que se pusieron a buscar (un caramelo),pero o el pasillo era muy blanco o el diente estaba muy sucio.
La maestra me lo vino a contar con una mortificación y solemnidad tal que parecía de luto.Y la cara de mi hijo hacía juego.Su preocupación era bien terrenal:como el Ratón Pérez iba a dejarle plata si no había diente para ofrecer a cambio?.
-No importa,yo le mando un mail-improvisé de inmediato.
-Pero el vive en las alcantarillas...-objetó mi sagaz retoño.
-Ah,pero igual tiene Internet!-contraobjeté yo,quien evidentemente le legué la sagacidad.
Milagrosamente,se quedó conforme.Después de todo,la idea de wi-fi en las alcantarillas de la ciudad o un ratoncito con notebook no es más delirante que cualquiera de las otras formas que usamos para explicar como el bicho se entera de que a los chicos se le caen los dientes,no?.
Y debo decir que funcionó.La carita de fascinación del gordo cuando encontró su billete esta mañana era impagable.
Cuántos dientes son en total a caer?.Hum,va a salir cara la joda.