martes, 1 de septiembre de 2009

A las chapas

Estoy planeando seriamente un atentado contra nuestro Jefe de Gobierno.Hablo en serio,no es joda.El pedacito mas grande de Macri va a aparecer dentro de su heladera si no empiezo a recuperar el sueño que por su culpa llevo perdido desde hace como 1 semana.
Resulta que a los cráneos que manejan esta ciudad se les dió ahora arreglar el tramo de la avenida Las Heras que pasa justo por debajo de mi casita.Más bien diría 12 pisos exactamente abajo de la almohada donde intento conciliar el sueño de los justos.
Empezaron primero con una perforadora un sábado 8 de la mañana.Menos mal que tengo hijos que me despiertan o les hubiera volado el despertador por la cabeza a los pobres tipos.Hasta el sonido de ese aparato es preferible a la perforadora.Dada la ubicación ya de por sí bastante ruidosa de mi dpto.,es lo mismo que si la tuviera en mi oreja.
Siguieron todo el domingo.Deben tener un sindicato de porquería o cobran muy bien las horas extras.A ésa altura ya me estaba poniendo un tanto violenta.Y si no me conocen violenta,lo bien que hacen.Créanme,no es un buen espectáculo.
A la tarde y durante todo el lunes (ayer) aflojaron.Obviamente el tráfico diurno puede ponerse muy caótico si encima de que tienen cortado un carril se ponen a perforar metiendo más ruido.
Pero hete aquí que en el asfalto habían quedado colocadas,aparentemente con mucha pulcritud,una serie de chapas o algo parecido,que van en diagonal hacia una esquina.El objeto de ese diseño,ni idea.Pero si conozco el objeto de haber puesto las chapas:volverme loca de remate.
Tuve toda la noche para descubrir que cada auto que pasa por las chapas (o sea unos 50 por minuto,a grosso modo) mete un ruido como si se cayese un volquete o una estantería completa (llena de chapas,claro).Claro qie de éso me enteré hoy a la mañana,cuando me crucé con una vecina tan ojerosa como yo.En el medio de la noche,sin estar al tanto de lo que me esperaba,me fui despertando más o menos cada media hora,y a medida que me acercaba más a mi horario de despertada (6 y media),me iba desvelando más y más.Cada despertada era con un sobresalto.Imagínense estar durmiendo tranquilamente y sentir que alguien está tirando metales pesados desde el cielo,a la altura de la oreja de uno.No pegué un ojo y pasé la mitad de la mañana tratando de reconciliarme con la raza humana.
Por lo pronto ya sé con qué panorama me voy a encontrar ahora cuando me vaya a dormir.Desde mi escritorio estoy sintiendo el ruidito a chapa.
Otra noche más como ésta,y alguien va a sufrir un accidente.Lo juro.

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