El lector

Y finalmente llegó el dí,promediando el 1er grado,en el que mi hijo aprendió a leer.Y tal como le pasó a su madre pseudoperiodista y blogger,le atacó la fascinación del principiante cuando se encuentra face to face con la dominación de la palabra escrita.
Todos los libros que antes había abandonado ahora quiere agarrarlos y leerlos el solito,por mucho que le lleve.También se para a leer cada cartel que ve en la calle,tipo Rain Man.Esto hace que la vuelta desde el colegio se hace larguísima:se para en todos lados,a leer lo que sea que vea,ya sea publicidades,letreros o revistas mal llamadas eróticas.Ése es otro tema,por cierto y aunque no tenga nada que ver con ésto.En mi época esas revistas venían en bolsita.Ahora cualquier revista tiene fotos de minas en bolas,y a la vista de cualquiera.No soy de las que creen que el nene se va a pervetir por ver un culo,pero no me divierte cuando se para en el medio del kiosco y grita para quien quiera escucharlo "mirá mamá,se le ven las tetas!".
La verdad que estoy encantada con mi hijo lector.Se le abre un enorme abanico de posibilidades,y se tienen más herramientas para combatir el exceso de Play,compu y tele.Por suerte en casa siempre se leyó mucho,y el vé el placer que a mi me genera tirarme a leer un libro.
Lo único que me gustaría es que a esta industria se le diera mas valor y los costos de los libros fueran como en Estados Unidos,donde una edición barata se consigue a 8 dólares.No sólo es barato en nuestro cambio casi 4-1,sino que si se ponen a sacar cuentas,significa que la incidencia de un libro en un sueldo promedio es de aproximadamente un 0,2%.Acá,aún tomando promedios mayores de sueldo,un libro representa el 2% del mismo.Y ojo,los libreros dicen que Argentina tiene los precios más bajos de Latinoamérica.
O sea,estamos en un país que no invierte en educación y tampoco en cultura,donde se gasta plata en imprimir y repartir un diario gratuito oficialista,pero donde ningun trabajador pueda conocer el placer de la lectura,salvo que recurra a las bibliotecas.Pero hay pocas y en la mayoría no te podés llevar los libros a casa,otra gran diferencia con cualquier país desarrollado.
Pero bueno,por si vienen vacas más flacas,todavía me quedó la colección del Topo Gigio...